miércoles, 15 de enero de 2020

La búsqueda de la solución del puerto DVI (II): ¿cómo distinguir los buenos consejos de los malos?

En el anterior artículo vimos como arreglar un par de problemas que tenía para conectar un segundo monitor al puerto DVI dejando solucionado el problema, pero como os dije iba a poner un segundo artículo para quien quiera profundizar en la búsqueda y solución de este tipo de problemas.

Lo primero que hice fue informarme en foros especializados y redes sociales, aunque con estas últimas hay que tener más cuidado, en cierto grupo "para profesionales" la solución que me planteaban era actualizar a la última versión de Ubuntu, la 19.10, ¡UNA NO LTS! como una solución mágica al problema, también está el que recomienda su distribución favorita como respuesta a todo aunque nadie les haya preguntado eso.

En estos casos hay que desconfiar y antes de cambiar una versión LTS por otra que no lo es lo que os recomiendo es probar primero con un pendrive en modo live para ver si se soluciona el problema y no se presentar problemas nuevos.
Tal como mi imaginaba no solo no se solucionaba el problema sino que aparecían otros nuevos, recordemos de una versión no LTS, es una versión de pruebas no apta para entornos de producción.

En fin, hay gente que se pone a aconsejar lo primero que se les ocurre pero de manera irresponsable y además con una rotundidad de catedrático de carrera, otros movidos por una noble intención de ser de ayuda. pero el caso es que no ayudan, si hubiera sido un novato que les hubiera hecho caso y no solo no tendría solucionado el problema sino que tendría otros y con una complicada vuelta atrás, y una mala impresión, injusta e irreal imagen del mundo GNU/Linux.

Así que toca buscarse la vida...

¡Ojo! Los dos siguientes pasos pudieron terminar el pantallazo negro, aunque es reversible, yo sí os aviso.

Comprobé el driver que estamos usando, ya sea mediante menú:
Sistema ► Preferencias ► Hardware ► Controladores Adicionales 

O desde consola:
ubuntu-drivers devices
A mi me sale que la mía es nvidia 390

A continuación lo que hice fue quitar los drivers que tenía, al final creo que este paso era innecesario y peligroso, bastaba con actualizarlo después de añadir el ppa:
sudo apt-get purge "nvidia*"

Y metemos el driver nouveau en la lista negra, para ello creamos el archivo /etc/modprobe.d/blacklist-nouveau.conf con el siguiente contenido:
blacklist nouveau
blacklist lbm-nouveau
options nouveau modeset=0
alias nouveau off
alias lbm-nouveau off
Y a partir de aquí puse el ppa e instalé el driver de la nvidia 390 como comenté en el artículo anterior.

Si hubiera tenido un pantallazo negro, es decir, que no arrancara las X, lo hubiera solucionado probando con mover el archivo de la lista negra a la carpeta $HOME por ejemplo para desactivarlo o habría probado a buscar e instalar diferentes paquetes con el comando apt search paquete o apt install paquete respectivamente.

Todo tiene solución, aunque estas cosas pueden asustar a los más novatos.


1 comentario:

  1. La gente viene a GNU/Linux todavía con la mentalidad de windowsero, al menor problema formatear en lugar de buscar y solucionar el problema.
    Así solo consiguen frustrarse y no aprender nada.

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